Érase una vez una clase que era de tercero y estaban dando Plástica, la seño Isabel dijo que fuéramos por las tijeras. Todos fuimos y en las tijeras de Paula había un ratón. Todos empezaron a hacer preguntas. José Antonio decidió matarlo, Hao-Ming decidió cazarlo y Patricia dijo que hay que hacerse amigo del ratón. El ratón se asustó y se fue a tercero B. Todos estaban chillando y el ratón se creía que se lo iban a comer.
Entonces el ratón se fue a ver cómo era el colegio. Vio que era muy grande y se fue a todas las clases a ver si en alguna le querían. Llegó a segundo B y le faltaba primero A y primero B. Se fue a primero B antes que a primero A. En primero B estaban dando voces y el ratón se fue a primero A. Allí estaba todo muy tranquilo y un niño llamado José Miguel se lo iba a decir a su seño que había un ratón. El niño se puso tan contento que se chocó con el padre y se le cayó un diente. Fueron todos a llevar al niño al médico. El ratón fue y cogió el diente y le dejó cien euros porque era el último diente que le faltaba en su colección.
Autora: Alba Fernández Braos
No hay comentarios:
Publicar un comentario